¿A su hija de 8 años le preocupa que sufra un accidente automovilístico cuando conduce al trabajo? ¿Su hijo de 10 años se enoja y siente pánico ante la idea de conocer nuevos niños en una fiesta de cumpleaños? Usted podría estar tratando con un trastorno de ansiedad.

La ansiedad es el trastorno psiquiátrico más común que afecta a los niños, según el Instituto Child Mind. Más del 40% de los 17,1 millones de niños estadounidenses diagnosticados con una afección psiquiátrica tienen algún tipo de trastorno de ansiedad, y más del 8% están gravemente afectados por su ansiedad. Pero el 80% de los niños con trastornos de ansiedad no reciben tratamiento, lo que puede llevar a trastornos psiquiátricos graves más adelante en la vida, como ataques de pánico y fobias sociales. El tratamiento puede cambiar el mundo para su hijo: solo tiene que encontrar la terapia adecuada.

Existen varias opciones de psicoterapia, que incluyen terapia familiar, grupal y de juego. Un enfoque llamado terapia cognitivo-conductual (TCC) se considera comúnmente como el tratamiento más efectivo para la ansiedad en los niños, según Jonathan Comer, PhD, profesor asociado de psicología y psiquiatría en la Universidad Internacional de Florida que se especializa en trastornos de ansiedad infantil. “Se enfoca en el hecho de que los pensamientos, comportamientos y sentimientos están todos conectados. Al cambiar los pensamientos, puedes cambiar los sentimientos. Para los trastornos de ansiedad, es esencial combinar la TCC con la terapia de exposición, en la que el niño se enfrenta de manera gradual y sistemática a situaciones u objetos de los que tiene miedo ".

Por ejemplo, si su hijo tiene ansiedad por viajar en ascensores, el terapeuta lo ayudará a acercarse lentamente al miedo. Primero, pueden presionar el botón para llamar al ascensor y mirar dentro cuando las puertas se abren. A continuación, pueden dar un paso hacia adentro, dejando un pie en el pasillo. Otro paso podría ser ir hacia adentro, pero manteniendo presionado el botón de emergencia para que las puertas no se cierren. "Todo esto puede ser a través de varias semanas", dice Comer. "Lo importante es que están practicando sus habilidades en situaciones cada vez más aterradoras, con un terapeuta con el que se sienten cómodos".

La terapia cognitiva conductual es muy efectiva, pero la terapia sola no siempre controla la ansiedad de un niño. Si la ansiedad persiste, los medicamentos recetados, particularmente ciertos antidepresivos, pueden ser útiles para tratar un trastorno de ansiedad.