La sífilis es una enfermedad de transmisión sexual (ETS). El primer síntoma suele ser una llaga (chancro) pequeña e indolora en la piel, el pene, la vagina, el ano o la boca.
La sífilis se transmite al tener relaciones sexuales vaginales, anales u orales con una persona que tiene un cáncer de sífilis (llaga). También puedes atraparlo (o contagiarlo) besando a alguien que tiene un chancro. No puede contraerlo o diseminarlo al compartir un baño o una piscina con una persona infectada. Tampoco puede contraerlo tocando objetos que tocó una persona infectada.
Las bacterias que causan la sífilis entran al cuerpo a través de la piel o de las membranas mucosas.
Si está embarazada y tiene sífilis, puede contagiar a su bebé por nacer. Los médicos llaman a esta sífilis congénita. También puede pasárselo a su bebé durante el parto o la lactancia.
La sífilis se trata fácilmente con antibióticos en sus primeras etapas. Una vez curado, no vuelve por sí solo. Pero puede volver a infectarse si tiene relaciones sexuales con alguien que lo tiene.
La mejor manera de evitar contraer sífilis es no tener relaciones sexuales. Si tiene relaciones sexuales, es importante usar condones y limitar la cantidad de parejas que tiene.
Si cree que estuvo expuesto a la sífilis, su pareja o sus compañeros también deben ser examinados y tratados para ayudar a prevenir la propagación.