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Cuando su adolescente tiene mucho sobrepeso, los cambios saludables en su dieta, ejercicio, sueño y otros hábitos son las mejores maneras de adelgazar. Pero si esos ajustes no son suficientes para hacer una diferencia, considere alguna ayuda externa. Muchos tipos de expertos, programas de pérdida de peso y otros tratamientos pueden ayudar.
Hable con el médico de su hijo antes de elegir cualquier programa o tratamiento para él. La pérdida de peso puede no ser una opción segura para los niños que no han alcanzado su estatura adulta. Además, asegúrese de que su hijo sea lo suficientemente maduro como para considerar estas opciones y entender cómo afectarán el resto de su vida.
Apoyo de expertos
Muchas familias se atascan cuando intentan ayudar a un adolescente con sobrepeso. Una persona ajena a la familia puede darle perspectiva y dirección, y ayudarlo a establecer metas realistas.
Comience con un médico, un dietista, un nutricionista u otro experto en obesidad en adolescentes. Un terapeuta, como un psicólogo o un trabajador social clínico con experiencia en pérdida de peso en adolescentes, también puede ayudar. Muchos niños con sobrepeso también luchan contra la depresión, por lo que la terapia puede tener beneficios adicionales.
Los expertos no están de acuerdo hasta cierto punto sobre el mejor enfoque de tratamiento. Algunos dicen que es importante hacer un seguimiento del progreso con pesajes regulares y el recuento de alimentos y ejercicio. Otros piensan que la contabilidad estrecha no funciona. Tienes que decidir qué opción se siente bien para tu familia.
Programas de control de peso
Verifique si su plan de seguro médico ayudará a cubrir los costos de estos. Las opciones incluyen:
Un programa en el consultorio del médico. Algunos pueden tener planes que incluyen sesiones con dietistas o expertos en comportamiento.
Centros de control de peso pediátrico en un hospital o centro separado. Estos pueden ser similares a los programas en consultorios médicos y ofrecen el apoyo de varios expertos.
Campamentos de inmersión o escuelas para adolescentes. Estos programas no son como los tradicionales "campos de grasa". Su objetivo es cambiar el comportamiento de un niño tanto como ayudarlo a perder peso. Si bien muchos niños adelgazan en los campamentos, debido a una dieta baja en calorías y más ejercicio, tienden a ganar más peso después. Los programas de inmersión ayudan a los niños a aprender maneras de comer más saludables y hacer ejercicio que pueden seguir haciendo cuando regresan a casa y regresan a sus "vidas reales". Puede ser una decisión difícil para usted y su adolescente, pero puede ayudar a largo plazo.
Aunque no son específicos para adolescentes, los programas comerciales como Weight Watchers aceptarán niños de 10 a 16 años con permiso médico por escrito. TOPS (Take Off Pounds Sensibly) ofrece apoyo grupal sin fines de lucro y puede permitir que los niños.
Continuado
Mas opciones
¿Qué sucede si estos pasos no ayudan a su hijo a controlar su peso? Luego, usted y su adolescente, con la opinión de un médico, podrían considerar otras opciones de tratamiento para la obesidad.
Medicación. No hay medicamentos recetados para bajar de peso recomendados para adolescentes. Estos medicamentos pueden tener graves riesgos para la salud y efectos secundarios. Si tiene curiosidad acerca de los medicamentos o suplementos para su hijo, hable con su médico.
Muchos adolescentes con sobrepeso experimentan con pastillas para perder peso de venta libre. Esos son ineficaces en el mejor de los casos y peligrosos en el peor de los casos. Si su adolescente está tomando alguno, hable con él sobre los riesgos.
Cirugía. Una operación para reducir el tamaño del estómago puede ayudar a los adolescentes obesos que no han podido perder peso de ninguna otra manera. Puede funcionar, pero tiene graves riesgos. Además, su seguro puede no cubrirlo.
La cirugía por sí sola no curará la obesidad en los adolescentes. Su hijo tendrá que seguir una dieta especial por el resto de su vida. Debe tomar este paso solo después de una cuidadosa consideración y una evaluación completa por parte de un equipo de expertos en obesidad infantil.