Tabla de contenido:
- Síntomas de un problema de deglución
- Síntomas de problemas del habla
- Obtención de un diagnóstico
- Continuado
- Tratamiento para problemas del habla
- Tratamiento para problemas de deglución
- Siguiente en complicaciones de la EM
Las personas con esclerosis múltiple, o EM, a menudo tienen problemas para tragar, un problema llamado disfagia. También puede conducir a problemas del habla. Ocurre cuando la enfermedad daña los nervios en el cerebro y la médula espinal que hacen que estas tareas se realicen.
Para algunas personas, estos problemas son leves. Otros tienen más dificultades para tratar los síntomas graves. Pero los tratamientos y las técnicas pueden ayudarlo a mejorar su habla y facilitar la deglución.
Síntomas de un problema de deglución
Usted podría:
- Tos o ahogo cuando comes
- Siente como si la comida estuviera alojada en tu garganta.
- Compre muchas infecciones pulmonares, como neumonía, que no puede explicar
Cuando no puede tragar adecuadamente, puede inhalar alimentos o líquidos en su tráquea en lugar de bajarlos por su esófago y su estómago. Una vez en los pulmones, pueden causar neumonía o abscesos. También podría estar en riesgo de malnutrición o deshidratación debido a que su comida y agua no llegan a su estómago.
Síntomas de problemas del habla
Los tipos de problemas del habla que causa la EM pueden variar según la parte del cerebro que esté dañada. Alguien con la enfermedad puede tener problemas leves con las palabras o problemas severos que les dificulten hablar y ser comprendidos. Un problema que es sutil al principio puede empeorar con el tiempo.
Las personas con EM suelen tener algunos problemas de lenguaje distintivo:
- "Escanear" el habla, cuando el patrón de habla normal de una persona se interrumpe con largas pausas entre palabras o sílabas
- Palabras de insulto. Por lo general, ocurre debido a la debilidad de la lengua, los labios y los músculos de la boca
- Problemas para cambiar el tono de voz
- Habla nasal
Obtención de un diagnóstico
Su médico le preguntará acerca de sus síntomas y le realizará un examen físico, prestando atención a cómo funcionan su lengua y otros músculos de la boca y la garganta.
En algunos casos, su médico puede recomendarle que se haga una prueba llamada un trago de bario modificado. Beberá un líquido especial que cubre su boca, garganta y esófago, y su médico le hará una radiografía. El fluido hace que tus interiores se destaquen en la imagen. La prueba ayuda a su médico a determinar dónde y por qué tiene problemas para tragar.
Su médico podría sugerirle que consulte a un terapeuta del habla o un patólogo del habla y el lenguaje. Puede averiguar qué parte de su habla se ve afectada y estudiar su control de la respiración y la forma en que mueve los labios, la lengua y otras partes de la boca.
Continuado
Tratamiento para problemas del habla
Si la rigidez muscular le dificulta hablar, los medicamentos pueden ayudar. Su terapeuta del habla también podría sugerir:
- Ejercicios para fortalecer o relajar las cuerdas vocales o mejorar la forma en que mueve la mandíbula, la lengua y los labios.
- Estrategias distintas del habla que pueden ayudarlo a comunicarse con los demás. Puede concentrarse en usar palabras y frases más cortas o formas de simplificar palabras, oraciones o sonidos.
- Practica controlando tu aliento. Puede ayudarlo a pronunciar oraciones más largas en una respiración o acentuar palabras específicas.
También hay otras formas de manejar sus problemas del habla:
- No te sientas apresurado o presionado cuando intentas hablar. Si se siente cómodo, puede ser útil que la otra persona sepa que tiene un problema de habla.
- Trate de hablar con alguien cara a cara siempre que sea posible. Sus expresiones faciales y sus gestos pueden ayudarlo a entender su punto.
- Si una conversación se prolonga demasiado, pregúntele si puede tomar un descanso.
- Intenta relajarte. Si puede mantener una actitud positiva, podría tranquilizarlo a usted y a la otra persona para que no se sienta ansioso por entenderse mutuamente.
Tratamiento para problemas de deglución
Un terapeuta del habla también puede ayudar a tragar problemas. Podría sugerir cambios en la dieta, posicionamiento de la cabeza o ejercicios que puedan ayudar. En casos muy graves, los tubos de alimentación pueden suministrar nutrientes y líquidos directamente al estómago.
Junto con la terapia, hay cosas que puede hacer para facilitar la deglución:
- Siéntese derecho en un ángulo de 90 grados, incline su cabeza ligeramente hacia adelante, o permanezca sentado o de pie por 45 a 60 minutos después de comer.
- Manténgase enfocado en las tareas de comer y beber. Mantenga las distracciones lejos. No hables con comida en tu boca.
- Ir lentamente. Trate de comer aproximadamente 1/2 cucharadita de su comida a la vez.
- Es posible que deba tragar dos o tres veces por bocado o sorbo. Si la comida o el líquido quedan atrapados en su garganta, tosa suavemente o aclare su garganta, y trague nuevamente antes de respirar.
- Concéntrate en tragar a menudo. Intente alternar un bocado de comida con un sorbo de líquido.
- Prueba diferentes temperaturas y texturas de líquidos. Por ejemplo, puedes hacer bebidas más frías o probar bebidas gaseosas.
- Beber mucho líquido. Chupe paletas de hielo, trocitos de hielo o agua con sabor a limón para que su boca produzca más saliva, lo que le ayudará a tragar con mayor frecuencia.
- Si la masticación es difícil para usted, aléjese de los alimentos que necesitan mucha potencia de la mandíbula.
- Si los líquidos delgados le hacen toser, intente espesarlos. También puede sustituir líquidos delgados por líquidos más gruesos: néctares para jugos y sopas cremosas para caldos simples, por ejemplo.
- Cuando tome medicamentos, triture sus pastillas y mezcle con puré de manzana o pudín. Pídale a su farmacéutico que le haga saber qué píldoras no debe triturar y qué medicamentos puede comprar en forma líquida.