Tabla de contenido:
¿Cómo se diagnostica la osteoartritis?
No hay análisis de sangre para el diagnóstico de osteoartritis. Los análisis de sangre se realizan para excluir enfermedades que pueden causar osteoartritis secundaria, así como para excluir otras afecciones de artritis que pueden simular la osteoartritis.
Las radiografías de las articulaciones afectadas son la principal forma de identificar la osteoartritis. Los hallazgos radiológicos comunes de la osteoartritis incluyen pérdida de cartílago articular, estrechamiento del espacio articular entre los huesos adyacentes y formación de espolón óseo. La simple prueba de rayos X puede ser muy útil para excluir otras causas de dolor en una articulación en particular, así como para ayudar en la toma de decisiones sobre cuándo debe considerarse la intervención quirúrgica.
La artrocentesis a menudo se realiza en el consultorio del médico. Durante la artrocentesis, se utiliza una aguja estéril para extraer el líquido de la articulación para su análisis. El análisis del líquido articular es útil para excluir la gota, la infección y otras causas de artritis inflamatoria. La extracción de líquido articular y la inyección de corticosteroides en las articulaciones durante la artrocentesis puede ayudar a aliviar el dolor, la hinchazón y la inflamación.
La artroscopia es una técnica quirúrgica mediante la cual un médico inserta un tubo de observación en el espacio de la articulación. Las anomalías y el daño al cartílago y los ligamentos se pueden detectar y, a veces, reparar a través del artroscopio. Si tienen éxito, los pacientes pueden recuperarse de la cirugía artroscópica mucho más rápidamente que de la cirugía de articulación abierta.
Finalmente, un análisis cuidadoso de la ubicación, la duración y el carácter de los síntomas articulares y la apariencia de las articulaciones ayuda al médico a diagnosticar la osteoartritis. El agrandamiento óseo de las articulaciones a partir de formaciones de espolón es característico de la osteoartritis. Por lo tanto, los nódulos de Heberden y los nódulos de Bouchard de los dedos y los juanetes de los pies pueden ayudar al médico a diagnosticar la osteoartritis.